«En Japón hacen muchas caricaturas de calidad. No son peligrosas si no las ves todo el día. Es otra cosa completamente diferente si los personajes son adolescentes, como la audiencia, quienes también son homosexuales, fuman y beben, y que incluso se cortan las venas», explicó la encargada del Centro de Protección de Niños contra las Amenazas En Línea del gobierno de Putin.
Después de los casos ocurridos con La ballena Azul donde se reportaron 130 suicidios adolescentes se logró abrir un caso para investigar este tipo de sucesos y su origen. Este caso basa sus declaraciones en que varios de los adolescentes que se suicidan estaban obsesionados con el anime.
«Claro, la raíz del problema es mucho más profunda que las caricaturas, pero están diseñados específicamente para este tipo de niños», continuó la encargada Ivanova. Poco después el director del Centro, Vladimir Rogov escribió: «lo mejor es restringir el acceso a grupos cuestionables: incluso si están jugando en segundo plano, su contenido se filtrará lentamente en el cerebro. Estamos en contra de las medidas drásticas, pero es hora de colocar a la cultura del anime en Rusia en el camino correcto».
¿Qué opinas? antes eran los videojuegos y ahora es al anime.
Fuente: The Moscow Times